22 de junio de 2011

Diego (Ángel) López Fernández


Dicen que todos tenemos un ángel. Un ángel de la guardia.
Y lo definen, y lo ves: con alas, esquivando tus pupilas e imposible a tu mirada. Te protege, te quiere y te salva. Dicen que lo tienes desde que naces, que siempre es el mismo. Y lo vuelves a imaginar; un traje blanco, ojos azules, tal vez de tez pálida también y para algunos más románticos, con un aro en la cabeza.
Yo hoy lo he visto, yo hoy lo he tocado. El mío es singular o mejor aún: único. Tiene el pelo negro como el carbón, y unos insignificantes ojos oscuros que no dicen nada en su cara. Él, el típico vestido blanco lo deja negro y olvidado por allí donde pasa, o lo rompe, o lo quema. Mi ángel es un despistado, es más, en cambio de estar protegiéndome día y noche, se pasa todo el fin de semana durmiendo y cuando llega a casa, no dice ni “hola” y se va directo a dormir.
En definitiva, mi ángel es un desastre, pero yo no me voy a quejar, porque a diferencia del resto del mundo, hace diecisiete años que lo palpo, diecisiete que lo aguanto. Él es mi ángel, ya podéis tener envidia.

16 de junio de 2011

uno más uno


Ya no solo me pican los minutos, con su larga punta afilada y sus sesenta tics (osegundos); sino que el paso del tiempo alimenta mis picaduras hasta que grandes llagas me tratan de leprosa.
A mis quinientasveinticincomil picaduras, unas cuarentaytresmil por mes; me levanto para recordarte que eramos un DOSperfecto, aunque lo intentes olvidar.

12 de junio de 2011

V


Podría morir por una mentira. No doy la razón a quien no la tiene, podría morir negándolo, negándome.
Para morir por tus ideales primero debes tenerlos. No estoy dispuesta a morir por los ideales que debería tener, no moriría por cualquier tipo de ideal. 
Tampoco sería la única persona que moriría por ellos, pero hoy en día lo consideraríamos leyenda; porque hoy en día un ideal es un conjunto de palabras bien combinadas, un conjunto de ideas populares (no personales) como debería serlo.
Porque para morir por un ideal ha de ser tuyo. Y aquellos ideales por los que la gente vive y muere, por los que la gente mata, aquellos ideales que cambian el mundo obedecen a una ley natural, una ley que solo personas dispuestas a morir por sus propios ideales pueden escuchar, una ley; LA VERDAD.

8 de junio de 2011

Physics.

Hay días en los que el mundo es cuadrado. No sé porqué, hoy es uno de ellos.

6 de junio de 2011

Ya sé que (nó) importa.


Ahora los meses han pasado desapercibidos por la luz del día y la sombra de la noche. 
Pasa el tiempo con todo colocado derecho y yo puesta del revés. 
Y me siento en una cámara oscura; no solo por el color de mi destino, si no por la perspectiva de mi realidad. 
Y cuando el pequeño rayo de luz penetra esa lente divergente puedo (ilusa) creer que estoy en otro plano, creer que puedo ver de verde (color esperanza) la comparación de mi pasado.
¡Pero nó! (tilde en la "o" porque es más rotundo todavía).
Ni el color verde llegó, ni el estar en armonía, ni la huida, ni el amor.

Insomnio.

 
Madrid es una ciudad de más de un millón
de cadáveres (según las últimas estadísticas).
A veces en la noche yo me revuelvo y me incorporo
en este nicho en el que hace 45 años
que me pudro,
y paso largas horas oyendo gemir al huracán,
o ladrar los perros, o fluir blandamente la luz de la luna.
Y paso largas horas gimiendo como el huracán, ladrando
como un perro enfurecido, fluyendo como la leche
de la ubre caliente de una gran vaca amarilla.
Y paso largas horas preguntándole a Dios,
preguntándole por qué se pudre lentamente mi alma,
por qué se pudren más de un millón de cadáveres
en esta ciudad de Madrid,
por qué mil millones de cadáveres se pudren
lentamente en el mundo.
Dime, ¿qué huerto quieres abonar con nuestra
podredumbre?
¿Temes que se te sequen los grandes rosales del día,
las tristes azucenas letales de tus noches?

-Dámaso Alonso.