3 de diciembre de 2012

Uno de los pesos de mi espalda

Todas las personas buscamos constantemente respuestas, y no hay cosa que dé más miedo que encontrarse a una persona perdida creyéndose poseedor de la verdad absoluta. No sé, por momentos te replanteas hasta que punto puedes estar seguro de lo que crees.
Siempre pienso que pensar no debe guiarte demasiado en tu forma de ver la vida, te transportará a un plano con infinitos caminos e infinitos argumentos que serán tan lógicos como tú quieras que sean, al fin y al cabo, solo verás lo que quieras y si lo que quieres ver son mentiras, éstas serán tu verdad.
¿Y si no existe la verdad?, eso es lo que me han planteado hoy. Encuentro completamente absurdo y limitado pensar eso, pero como he dicho, el pensamiento puede hacer coherente cualquier cosa. No podemos decir que no existe la verdad porque nosotros no la sabemos, ¡qué ganas de creernos superiores!. No hay ser más limitado que el que cree entender todo, y que si él no es capaz de entenderlo, no existe. Complejo del hombre de ser hombre. La verdad existe, que tú la percibas como quieras es tu problema.
Siempre es más cómodo creer que las cosas como no las sabemos, como no las podemos asimilar, como nuestra limitada mente no puede estudiarlas, no son. Qué fácil, qué cobardes.
Si al fin y al cabo, tu única finalidad en esta vida es ser feliz (y pongo en duda que para alguien no lo sea); ya puedes alimentar tu ego, ya puedes dejar ir tu mente, ganar más dinero, leer más, ser más inteligente, tener más carisma, ser más sociable... Hay gente que puede hacer más que tú, con menos. Hay gente que puede ser feliz sin tanta parafernalia. Si algo tiene la vida, es que parte de la sencillez para volver a la sencillez, y no hay placer más grande que degustar la sencillez desde los ojos de alguien que ha visto todo lo complicado. La valoras. Y es que al final todo rige en lo mismo, no importa lo que tengas, sino cuanto valor le des a lo que tengas. Un valor subjetivo sin duda, la mente siendo objetiva no podría darle el mismo.

13 de noviembre de 2012

guns'n'roses


Cada vez parece que dinero/poder y valores son dos cosas incompatibles, y que en la vida tienes que sacrificar uno de estos dos para tener el otro.

6 de noviembre de 2012

Para algunos, vivir es galopar un camino de horas, minutos y segundos. Yo más humilde soy y sólo quiero que la ola que surge en el último suspiro de un segundo, me transporte mecido hasta el siguiente.

Extremoduro - Salir, beber

3 de septiembre de 2012

Pequeña lágrima

Trato de entender poco a poco que lo que era blanco no puede ser de la noche a la mañana negro, y viceversa. Básicamente por el mero hecho de que no hay nada blanco ni negro, porque la realidad no te hace ni subir ni bajar, se mantiene por si misma. Nuestra visión de la realidad, que por lo contrario es subjetiva, cambiante, inestable; te mueve entre la euforia y la depresión volviendo a tu corazón un loco falto de paz...

29 de agosto de 2012

Pensamientos de la nada en el bar de la esquina (II)

Ver primera entrada del blog: primeros pensamientos en el mismo bar de siempre.


¿Quieres saber qué se siente cuando estás a un solo paso del gran cambio de tu vida? Pensamientos de la nada, en el bar de la esquina. Murmullos en diferentes coordenadas, reiterándose así la misma situación dos años después. La vida más desgastada, de la misma forma que el oxígeno oxida un hierro.
Seguía haciendo esquina.
Dicen todavía las malas lenguas, aquellas que salivan veneno como las serpientes, que Esperanza no se vio más desde aquel veintidós de septiembre. ¡Pero es mentira! Yo la he visto irse a menudo, incluso cuando la situación la invitaba a quedarse. Han sido veintitrés meses de duro contacto con la realidad, de pura sensibilidad de lo auténtico; desde lo más suave hacia lo más áspero, del terciopelo a las espinas, a lo abrupto.
Seguía faltando un cambio de rumbo.
Cuando las sonrisas de ese bar se fueron, ya eran de esa tarde las ocho. Las veinte horas de un veintinueve de agosto: medidas con el mismo reloj, miradas con los mismos ojos. 
Quieta, el proyecto de mujer que siempre quedaría en proyecto, seguía petrificada en esa maldita mesa, viendo los segundos correr y contemplando como los iba perdiendo.
Seguía pensando en nada, cobarde; seguía en la misma esquina; impotente.
Aferrada a aquellos viejos meses como un imán a una nevera y no dispuesta a olvidar el olvido. Nunca quiso aceptar que veintitrés meses después no eran veintitrés meses antes. 
Y por la misma cortina líquida por donde la Esperanza (dijeron) se fue; apareció la Libertad con todo el pánico que conlleva; para recordarle que las mujeres no juegan a vivir; que jugar a pensar en nada cada veintitrés meses, es cosa de niñas…

Entre andenes

Pero mira bien las calles, están todas llenas de gente andando con rumbo o sin. ¿Lo ves o no? Porque no es lo mismo ver que mirar. Yo veo pequeños mundos andando de arriba hacia abajo, cogiéndo el metro, tomando café. Interconectándose sin parar. Pequeños soñadores, almas perdidas, vagabundos, ricos de corazón, probres de espíritu; prostitutas, inocentes, culpables, frustrados, ilusos, perezosos, hipócritas, utópicos... Veo palabras, miradas, rencores que se clavan como espadas entre toda esa heterogeneidad de almas. Bajan, suben a los vagones; bajan, suben las escaleras; aprecian el Sol pero no se dan cuenta de lo maravilloso que es. 
Son los pequeños tornillos de una gran máquina, se coordinan, probablemente cumplan su papel; pero no tienen ni idea de cuál es la finalidad. Van moviendo como ignorantes el motor de no saben qué máquina, para completar no saben cuál función. Son tan limitados, que únicamente ven lo que tienen delante de sus propias narices, y creen con certeza absoluta que el límite de la realidad lo establecen los sentidos; y a veces, incluso ni eso.
¿Y sabes qué es lo peor de todo? Que tu y yo formamos parte de esa multitud...

11 de agosto de 2012

Forse un giorno potremo incontrarci di nuovo lungo la strada.

6 de agosto de 2012

“Si amas al dinero a lo sumo llegarás a un banco, pero si amas a la vida seguramente llegarás a Dios.” 

F.Cabral

3 de agosto de 2012

When the working day it's done; girls just wanna have fun.

31 de julio de 2012

Fragmentos de "No estás deprimido, estás distraído"

"Si escucharas al otro, al que llevas dentro sabrías todo. En todo encontrarías algo para ti. Entonces te elevarías constantemente y ya no habría confusión sino matices, y en esa serenidad no buscarías nada, entonces, encontrarías todo. Y estando en el presente dirías y harías lo que hay que decir y hacer en cada momento natural y graciosamente sin esfuerzo, lo que haría que tu relación con los demás fuera plena."


Facundo Cabral

24 de julio de 2012

No son los campos lo único que ha ardido

Este domingo 22 empezaron los incendios de la Jonquera y Portbou. Se han quemado más de trece mil hectáreas, han muerto muchísimas plantas y muchísimos animales. La gente ha perdido sus campos, sus remados, incluso sus casas. A mucha gente se les han evaporado los objetivos de una vida; han sencillamente desaparecido entre el humo negro y naranja. Esto son más que palabras, estamos hablando de una gran pérdida causada por uno de los peores incendios que se han visto en España estos últimos años.

El tercer día entre llamas, parece que finalmente se podrá a empezar a controlar el incendio. Llegas a casa, te conectas a Internet, y te encuentras con comentarios estúpidos, (de gente estúpida) que utilizan esta desgracia para reírse de los catalanes. Y cuando ves eso, seas catalán, seas español o directamente seas persona (única característica verdadera en nosotros), piensas qué clase de descerebrados pueden burlarse de la muerte de personas, plantas y animales. De la destroza de un terreno y la pérdida de muchas ilusiones.

Esto no es un síntoma del nacionalismo español, o del estúpido odio que hay entre personas que se hacen llamar catalanas y personas que se hacen llamar españolas; esto es simplemente un síntoma de lo poco evolucionada que está la conciencia humana, de lo primitivos que somos (algunos bastante más que otros) y entre otras cosas de lo poco mentalizados que estamos del importante papel que tiene la naturaleza en nuestras vidas. Siendo el hombre tan poco evolucionado ¿qué sociedad podemos esperar como resultado humano?

9 de julio de 2012

Si hay algo que he aprendido estos dos años, es en perderme dentro de los horizontes de la mente, y descubrir la infinitud que liga el pensamiento con una línea matemática. No hay fondo, no hay desenlace y si lo encuentras será autodestructivo. La única conclusión a la que te lleva la mente es que con la mente no puedes obtener conclusiones. Para algo tan sencillo perdí veinticuatro meses. Tal vez no fuese completamente una pérdida, tan solo un mal uso, y que además me ha capturado; habiendo perdido la esencia que te hace gozar la vida.Dar infinitas vueltas a este callejón sin salida, esperando una respuesta.

8 de julio de 2012

(Miguel Hernández)

(Elegía a su amigo por su temprana muerte)


Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.

Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas

daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado
que por doler me duele hasta el aliento.

Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.

No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.

Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.

Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.

En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.

Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.

Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.

Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera

de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.

Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irá a cada lado
disputando tu novia y las abejas.

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.

A las ladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.





(Desgarrador..)

8 de junio de 2012

Hijos del Cid!
¡De la segunda a la tercera!


Demasiado pronto para sacar conclusiones, pronto para hablar y perder la fuerza por la boca.

31 de mayo de 2012

Cuando lo injusto se vuelve lo efectivo y lo útil, es cuando nos encontramos la mierda de mundo en que vivimos.
Entonces aprecio mi soledad en medio de esta multitud de gente. Veo a los demás y a mí misma en ese afán de ignorar que no pertenezco a nada de lo que me rodea y de seguir empeñada en disimular la mancha negra que represento en medio de todo lo blanco.
En momentos como este la rabia, la injusticia y el conjunto de voces escupiendo mentiras e hipocresías, perturba mi mente. Son momentos en los que el cielo se cae al suelo, en el que tu realidad se destruye para dejar paso a una nueva. Y ahí es cuando busco desesperadamente la soledad. Tal vez sea un error, pero a veces existe la esperanza de llegar una conclusión que no te decepcione, y espero no decepcionarme nunca.

29 de mayo de 2012

Hoy se me ha planteado una gran duda y es si la justicia existe, y en el hipotético caso de que exista ¿qué margen de tiempo se toma para actuar?

21 de mayo de 2012

Entre las tenues luces de las noches y las lámparas, el olor a humo, comida y palabras nos aturde lentamente. Noches de viernes, balcones y música: noches de silenciosa fiesta. Y las ideas más profundamente escondidas empiezan a brillar con luz propia: como las estrellas. Es entre carcajadas entonces, cuando se descubre lo que no se explica, la sinfonía de eso llamado amistad. Y fantaseamos con las incógnitas que nos plantea el futuro, y nos lo preguntamos todo sucesivamente; con la única intención de saber e ir respirando el momento. Como si no existiese la mente, nuestra mente; como si solamente fuésemos eso, nosotras, sin ningún tipo barrera. Sin ninguna pared de hierro u otro metal. Como si fuésemos el punto de intersección entre tres vías, la unión, la síntesis.
Y pasamos las horas perdidas en pensamientos, viendo correr el reloj y estático el marrón de las paredes. Saboreando inocentes qué será el destino, procurando mejorar, procurando sacar lo mejor de cada una de nosotras.

18 de mayo de 2012

Tómalo como un juego.
De repente somos individuos frágiles en medio de una futuro incierto, y vamos a estar empujados por un fuerte viento, sacudidos por un fuerte huracán hacia cualquier ficción posible que la vida quiera para nosotros. Desorientados, extraños. Viviendo en un mundo que da igual cómo sea, porque el único mundo que vives es el tuyo; independiente, individual, máximo exponente humano, mayor fuerza. Extraños. En ese intento de racionalizar la vida y acabar dándole palos al aire. 
Desorientados, completamente perdidos. Inciertos hacia nuestro propio misterio. Fuertemente sumergidos en nuestro propio ser como si mirásemos de caras a un extraño. Libres de nuestros actos y esclavos del destino.

12 de mayo de 2012

Necesitas eso, irte de aquí, solo buscas huir, alejarte de este aire. Quieres acabar con todo lo que te rodea, y escapas, piensas en escapar, es la única solución que queda. Creo por eso, Cristina, que no te das cuenta que de lo que huyes no está aquí y a la vez está en cualquier parte que vayas. Es más fácil creer que escapar de este suelo que pisas te dará la felicidad. Este suelo no tiene ningún problema, no es infeliz ni antipático, es simplemente un suelo. Yo creo que tu huyes de ti, eres lo que no soportas, eres el asesino y la víctima. Pero a ver, por más lugares que vayas seguirás estando contigo, seguirás jodida, seguirás perdida en ti. 
Irte no cambiará nada a no ser que cambies tú...
Tantos lugares en el mundo y yo estoy aquí, precisamente aquí, entre estos árboles. Entre estas aceras, una vez pisadas por mis pies, cuando todavía mantenían sus pocos centímetros de tamaño; cogida de la mano de alguien que todavía existía; viviendo una especie de utopía, sintiendo esa especie de burbuja que inexplicablemente la infancia te hace sentir. Bajando, subiendo exactamente estas escaleras y no otras. 
Esperándote, años más tarde, en la esquina de este edificio verde, alimentando tus venganzas, poco a poco conociendo, como la realidad destruye esa burbuja infantil; como la verdad te revienta poco a poco esa mentira que preferías vivir. Y tú quedas mudo.
Y puede que tal vez una docena y media de años después, te pares de nuevo bajos estos mismos árboles, coordenada única en el mundo y en la que has acabado tú. Y puede que te des cuenta como las utopías van marcando un degradado en tu vida, consumidas por los segundos, poco a poco; consumidas por la experiencia, destrozadas por la despiadada realidad; como la ceniza de un cigarro. Y sigues aquí plantada, como si no existiera nada más en el mundo que estos árboles, estas aceras, tú y esta maldita forma que tiene el pasado de manifestarse. 
Y entre la lluvia que cae de un lagrimal, la nostalgia perfora tus poros, agitándote en temblores, volviéndote frágil... con el único propósito de hacerte caer al suelo y dejarte allí, debilitándote lentamente, fluyendo entre el dolor con la misma serenidad con la que llegas al paraíso...

28 de abril de 2012

Precipitación

Desarmonización absoluta. Choque frontal con las circunstancias de la vida, desorden, caos. Hostilidad recíproca. Aislamiento frustrado, esperanza de vida incogniscible, esperanza para vivir degradada. 
Desarmonización extrema. Metamorfosis de cualquier sentimiento en rabia. Autoreflexión constante, constante sentimiento de culpa. Gran afinidad a la autotortura. Impotencia, descontrol, agotamiento. Desilusión vital, oscilaciones entre la ataraxia y la ira: euforia degenerada. 
Desarmonización continua. Lucha a amor y odio con la base de tu existencia, con tu única posesión: contigo. Consecuentemente poca afinidad con el entorno, repulsión ante cualquier acercamiento, combinación contraproducente. 

Dudas: querer o deber.

22 de abril de 2012

"Venceréis, pero no convenceréis"


"A VECES QUEDARSE CALLADO EQUIVALE A MENTIR"
[...] 
Un camino enteramente contrario fue el seguido por el filósofo vasco Miguel de Unamuno, autor de “El sentido trágico de la vida” y portaestandarte de la generación del 98. Como rector de la Universidad de Salamanca, se encontró al principio de la Guerra Civil en territorio nacionalista. Todavía el 15 de Septiembre, continuaba apoyando el movimiento nacionalista en su “lucha por la civilización contra la tiranía”.
Pero el 12 de Octubre había cambiado. En esta fecha, día de la Fiesta de la Raza, se celebró una gran ceremonia en el paraninfo de la Universidad de Salamanca. Estaba presente el obispo de Salamanca, se encontraba allí el gobernador civil. Asistía la señora de Franco. Y también el general Millán Astray. En la presidencia estaba Unamuno, rector de la Universidad.
Después de las formalidades iniciales, Millán Astray atacó violentamente a Cataluña y a las provincias vascas, describiéndolas como “cánceres en el cuerpo de la nación. El fascismo, que es el sanador de España, sabrá como exterminarlas, cortando en la carne viva, como un decidido cirujano libre de falsos sentimentalismos”.
Desde el fondo del paraninfo, una voz gritó el lema de Millán Astray“Viva la muerte”Millán Astray dio a continuación los habituales gritos excitadores del pueblo: “¡España!”, gritó. Automáticamente, cierto número de personas contestaron: “Una ““¡España!”, volvió a gritar Millán Astray“¡Grande!”, replicó su auditorio, todavía algo remiso. Y al grito final de “¡España!” de Millán Astray, contestaron sus seguidores “¡Libre!”. Algunos falangistas, con sus camisas azules, saludaron con el saludo fascista al inevitable retrato sepia de Franco que colgaba de la pared sobre la silla presidencial.
VENCERÉIS, PORQUE TENÉIS SOBRADA FUERZA BRUTA, PERO NO CONVENCERÉIS, PORQUE OS FALTA RAZÓN Y DERECHO
Todos los ojos estaban fijos en Unamuno, que se levantó lentamente y dijo: “Estáis esperando mis palabras. Me conocéis bien, y sabéis que soy incapaz de permanecer en silencio. A veces, quedarse callado equivale a mentir. Porque el silencio puede ser interpretado como aquiescencia. Quiero hacer algunos comentarios al discurso – por llamarlo de algún modo – del general Millán Astray que se encuentra entre nosotros. Dejaré de lado la ofensa personal que supone su repentina explosión contra vascos y catalanes. Yo mismo, como sabéis, nací en Bilbao. El obispo – y aquí Unamuno señaló al tembloroso prelado que se encontraba a su lado – lo quiera o no lo quiera, es catalán, nacido en Barcelona”. Se detuvo. En la sala se había extendido un temeroso silencio.
Jamás se había pronunciado discurso similar en la España nacionalista. ¿Qué iría a decir a continuación el rector?“Pero ahora – continuó Unanumo – acabo de oír el necrófilo e insensato grito, “Viva la muerte”. Y yo, que he pasado mi vida componiendo paradojas que excitaban la ira de algunos que no las comprendían, he de deciros, como experto en la materia, que esta ridícula paradoja me parece repelente. El general Millán Astray es un inválido. No es preciso que digamos esto con un tono más bajo. Es un inválido de guerra. También lo fue Cervantes. Pero desgraciadamente en España hay actualmente demasiados mutilados. Y, si Dios no nos ayuda, pronto habrá muchísimos más. Me atormenta el pensar que el general Millán Astray pudiera dictar las normas de la psicología de la masa. Un mutilado que carezca de la grandeza espiritual de Cervantes, es de esperar que encuentre un terrible alivio viendo como se multiplican los mutilados a su alrededor.”
En este momento, Millán Astray no se pudo detener por más tiempo, y gritó: “¡Abajo la inteligencia! ¡Viva la muerte!”, clamoreado por los falangistas.
Pero Unamuno continuó: “Este es el templo de la inteligencia. Y yo soy su sumo sacerdote. Estáis profanando su sagrado recinto. Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta. Pero no convenceréis. Para convencer hay que persuadir. Y para persuadir necesitaréis algo que os falta: razón y derecho en la lucha. Me parece inútil el pediros que penséis en España. He dicho.”
Siguió una larga pausa. Luego con un valiente gesto, el catedrático de derecho canónico salió a un lado de Unamuno y la señora de Franco al otro. Pero esta fue la última clase de Unamuno. En adelante, el rector permaneció arrestado en su domicilio. Sin duda hubiera sido encarcelado, si los nacionalistas no hubieran temido las consecuencias de tal hecho.
Unamuno moría con el corazón roto de pena el último día de 1936.


(filosofíadigital.com)
[Rectificar es de sabios]

18 de abril de 2012

Celedonia López - Niña de luz

PARA MONTSE.

Yo, que vengo de lejos, vida arriba
que dejé atrás senderos de tristezas
y muchas, muchas lágrimas,
a ti, niña de luz, joven promesa
hoy quiero regalarte una sonrisa.

Asómate a la vida,
por la ventana azul de la alegría,
elige un pensamiento que te lleve,
por caminos tranquilos
donde duermen los duendes, 
donde duermen las musas, 
esperándote.

Diles que eres poeta, que naciste...
para darle color a las palabras,
para hacer con las letras serpentinas
que adornen los paisajes oscuros de la vida.


Cuando te encuentres sola,
cuando a tu puerta llame la tristeza
no le abras pregunta,
si viene acompañada por esa oscura pena
que oprime el corazón atormentándolo.


Si tan solo es tristeza, puedes abrir sin miedo.
La tristeza, es tan solo una brisa llorona
que al derramar sus lágrimas,
aligera su peso y sigue su camino cual indefensa nube.
Yo sé mucho de penas oscuras,
de fantasmas, y de como alejarlos.

Niña de luz escucha a la experiencia
abre le tu ventana a la alegría
y ríe, ríe fuerte aunque no tengas ganas
por que la risa espanta los fantasmas.

Cualquier clase de amor, hasta el mas puro
puede herir cual la mas bella rosa.
Tú puedes elegir en el recuerdo
su mágico color... o, aquella espina
que te dejó su huella.

Tu tía Cele. (Éste es su blog)

16 de abril de 2012

Con-jugados


Es como si el paso del tiempo hubiese sido invisible para mí. De repente ya estaba aquí, pero no sabía cómo había llegado; y aunque fuese capaz de recordarlo, no me parecería real.

Me levanté a las siete, como de costumbre. Era lunes. Sentía el estridente sonido del campanario marcando los quince minutos que había perdido, pero yo siempre permanecía inalterable ante el tiempo. Hoy Marco me esperaba en el café, para darme la apasionante noticia que lleva días queriéndome contar. Otro viaje, seguro.
Hace días empecé a darme cuenta como todas aquellas metas y pasiones que un día establecí con emoción, las alcancé con la ausencia del placer que supuestamente comportaban. Me gustaba viajar, quería sacarme la carrera y poder trabajar en diferentes partes del mundo... y ahora, que lo tenía en mis manos, no me importaba. Quería algo más, diferente, pero ya no tenía la esperanza de obtener ningún tipo de satisfacción. Únicamente quería salvar mi vida del caos del aburrimiento, de permanecer estancada como el agua en una bañera, de condenarme a la putrefacción con el paso de los años, por culpa de no haber conseguido ningún clímax al final de un largo trabajo. Solamente quería un camino, no una meta. Pasar el tiempo concentrada en algo que me impidiese acabar de darme cuenta de que la felicidad son un grupo de momentos ampliamente distribuidos, y prácticamente imperceptibles.
Allí estaba él con su chaqueta azul, mirándome por la cristalera del local. Era inevitable no apreciar la elegancia que desprendía al bajarme del coche destartalado, con el físico tan poco agraciado que me había dado Dios, si es que existe. Hoy Marco tenía el gesto soberbio. Me aterrorizó antes de entrar al bar. Ya me había pedido el desayuno y se disponía a contármelo.
Marco en ocasiones era dañino, desgraciadamente, siendo consciente de ello. Le gustaba sentirse importante delante de la gente y demostrar su agilidad mental en cada comentario que salía de su boca. Si algún día se fijó en mí, fue por la resignación de no poder utilizar sus trucos. Mi mente nunca ha sido muy despierta, y mi ignorancia me imposibilitaba seguirle el juego. Todo esto le daba un atractivo singular.
Empezamos a hablar, y lo dijo de golpe y sin miramientos. Son ese tipo de palabras que me erizan la piel, que activan seis de mis cinco sentidos. Yo seguía con la boca cerrada; esquiva a sus miradas para no dar ningún margen de error, para no invocar ningún tipo de sospecha sobre la alocada dirección de mi auto control. Seguía serena, con la sonrisa entre cerrada, con la sonrisa medio abierta, irónica, con ese gesto en la cara que suele tener la gente cuando controla una situación.
En cambio él sin ningún tipo de disimulo continuaba su repertorio ignorando mis adentros, inmune a mis afueras. No necesitaba disimular porque no ocultaba nada, él jugaba con ventaja. Entonces, de nuevo mi mente se perdía en el infinito debate moral: decirle que le quería o no decírselo.
Marco se iba a casar y con ello se disipaban completamente las posibilidades de recuperar una de las pocas cosas por las que había valido la pena vivir. Quedé muda, hundida. Al fin y al cabo era la reacción que el perfecto manipulador estaba esperando. Le felicité y me fui.
Llegué al trabajo pálida pero ese pálido se volvió transparente al saber que me habían despedido. Me quejaba de la rutina, y la vida me regaló un día lleno de sorpresas; una chica afortunada, sin duda alguna. Tenían que reducir plantilla y los novatos fuimos los elegidos. No intenté reclamar nada, ya daba igual, encontraría otro trabajo.
Vives tranquilo hasta el poderío del destino te lo destroza todo con más fuerza que un huracán, y tú, te quedas pasivo, no tienes nada que hacer contra ello.

Me sentía extremadamente frágil en aquel momento, si me hubiesen tocado con un dedo, me hubiera derrumbado. Sin embargo, estaba parcialmente cómoda dentro de mi estado de fragilidad, como si ésta fuese provocada por una percepción correcta de una realidad desagradable, percepción a la cual aspiraba en mi estado normal. Por otra parte, el poner en duda si la situación realmente podría ir peor, me proporcionaba fuerza. Mínima, pero fuerza. Como si no tuviese nada que perder porque ya lo tenía todo perdido; la fuerza del superviviente, la hija de la espada y la pared, de la vida y la muerte. Como si fuese empezar de cero el camino que tanto buscaba.

5 de abril de 2012

"Tal vez el sentido de la vida para una mujer consiste únicamente en ser descubierta así, mirada de manera que ella misma se sienta irradiante de luz. No en mirar, no en escuchar venenos y torpezas de otros, sino en vivir plenamente el propio goce de los sentimientos y las sensaciones, la propia desesperación y alegría. La propia maldad o bondad..."

nada.- carmen laforet

25 de marzo de 2012

Avi no et pots arribar a imaginar lo molt que et trobo a faltar.. trobo a faltar que m’escridassis, que quan et dic una bona nota em miris amb aquella cara d’alegria i em felicitis, trobo a faltar quan em picaves suaument la galta, generalment l’esquerre, i em deies lo guapa que estava, que em fessis parar de menjar perquè sinó després em queixo de que estic gorda, que arribés a casa i em diguessis “ avui el dinar l’he fet per tu”. Trobo a faltar trucar al primer pis i que em contesti una veu greu que primer feia un estossec i després deia: si, diguem? Per trobar a faltar trobo a faltar el soroll que feien les teves sabatilles al caminar, la manera com sempre portaves el drap a l’esquena, lo detallista que eres, quan em corregies algun castellanisme que se m’escapava, simplement com bé he dit al principi de l’escrit et trobo a faltar a tu. M’agradaria que allà on estiguis hi hagués alguna manera de fer-te arribar aquest escrit, se que no has marxat que segueixis aquí amb mi, però se’m fa massa difícil no veure’t. Lo que més m’ha agradat de haver-me mudat cap aquí, és haver trobat en tu el pare que ha estat absent durant la meva infància i que encara ho està. Potser sóc una mica egoista, però sempre es repeteix la mateixa pregunta al meu cap: “Perquè tu i no un altre?” T’estimo. 

Laura Brandao Payró

23 de marzo de 2012

Cuento las horas que restan a este algo, para que todo tenga sentido. Así sabré que ha valido la pena, que hay un rumbo entre tanto raíl pisado, que las finalidades constantemente desconocidas existen. Contaré los minutos de cada respuesta para saber si es proporcional el esfuerzo a la recompensa.

18 de marzo de 2012

Never lose your individuality

10 de marzo de 2012

Diez y ocho.

7 de marzo de 2012

A quién le importa.

29 de febrero de 2012

Resbaladizo

 Cada escalón del metro me alejaba más de la traición. Ya no sabía si me habían traicionado o si me había traicionado. Paradójico como ir hundiéndome bajo el suelo elevaba mi consciencia. Tranquila iba abandonando el hilo que me ataba a esta absurda realidad, a este absurdo mundo.
No paraba de cuestionarme como los golpes más duros me producían semejante reacción, semejante paz, como si no necesitase más placer que el propio dolor, que la propia realidad agitando duramente mis fantasías.  Todos podían gozar las nubes. Otros estábamos destinados a morder la tierra, imposible subir más alto, imposible sostenernos; éramos la alta densidad cayendo por el frágil aire. Solo teníamos una oportunidad, una ventaja: la seguridad de pisar tierra firme, por más dura que ésta estuviese.

28 de febrero de 2012

Cuantas veces no me perdería entre la nada, libreta en mano, como si las horas no tuviesen límites, como si mi vida no tuviese otro propósito.

27 de febrero de 2012

I spent all time inside my doubts. Ignore, don’t let destiny pass. Those were the rules, that was my decision. I was condemned. My punishment was strangely developed, I wasn’t living my life. Which was my crime? Have this sentence a reason? I definitely was the prisoner, the prison and the judge. I need no enemies, could do everything by myself, could doubt everything, couldn't let time going by, could go on with that…  

Living my rules, ruling my life.
Donde el cielo y el suelo confluyen, lo ambiguo se convierte en necesario.

20 de febrero de 2012

Lo previsible ya me aburre, pero le pertenezco.

Intermitente

No quiero pensar qué quiero, ni evaluar los pros y los contras. No quiero escoger pensando qué me beneficia, qué me perjudica, qué pasará, pues no soy quien para hacerlo. No quiero taparme los oídos para no oír lo que el instinto me dice, lo que sé, lo que hay, lo que siento. Quiero ser fuerte, escucharlo y seguirlo aunque me diga todo lo que no quiero ver.
No voy a colorear las situaciones, si están vacías lo están y yo no modifico ni el tiempo ni el espacio. No voy a sonreír más gilipolleces, ni a decirle hola a un adiós. Que no me toque más la corriente, no nadaré ni en contra ni a favor; ya no pertenezco un río y estando fuera de él, ¿porqué debería lanzarme?
Tal vez pararme a ver la velocidad del entorno, quieta, y tocarlo para saber si es real. Porque la realidad que vemos no es la realidad que hay; existe algo más, más allá de lo que nos trazan, más allá de lo que delimitan, dibujan, te imponen... La realidad reducida te reduce a ti a nada.
Intermitente, poco constante, lo ambiguo te posee mientras nadas en ríos de mentiras. La única realidad que hay la tengo dentro y la seguiré ausente a lo de fuera, que tan inverosímil es, que me hizo dudarlo todo y anular mis respuestas. Las que ya tenía, las respuestas que me dio aquella persona a la que no le importaba como le quedaba un vestido o si iría al cine esta misma tarde, a la que le daba igual el tacto porque no lo tiene, a la que le daba igual la vista, la oída, el gusto... a la que no le importaba el placer ni la euforia, porque anhela la tranquilidad y la armonía; la que no vestía extremos porque estaba en la coordenada exacta. La que no es de aquí, la que no quiere nadar.

El Árbol de la Ciencia

Andrés siempre se ha debatido entre pensar, contemplar y reflexionar o actuar, vivir la vida e intervenir. El título de la obra remete a un personaje del génesis (Adán y Eva), que se encuentran con el árbol de la vida y el árbol de la ciencia. El saber es solo para los dioses, si el hombre intenta ser como dios, acabará mal.
La desmesura por saber conlleva la infelicidad.
Andrés, en cambio, siempre pretende encontrar un sentido filosófico y científico a todo lo que sucede para que la vida cobre sentido. Ese es su error, la causa de su suicidio.

13 de febrero de 2012

Tal vez haya vías más fáciles, pero ésta es la que me toca seguir a mí.

8 de febrero de 2012

Querer coger el viento con las manos y verme arrastrada por él

Mi estridente percepción de la realidad no me dejaba vivir tranquila. Estaba arraigada a ella, que ni tan buena era, ni tan mala, simplemente era, y no como me la habían descrito. Entonces solo quería tener los pies en el suelo de una manera tan consistente que mis zapatos penetrarían la misma tierra. Mi huida del autoengaño tenía una simple razón: alejarme del dolor.
Yo siempre sufría daños, engañada o sin engañar, siempre, porque cuando estaba en las nubes sabía que la gravedad de la vida me haría caer, y cuando rascaba la arena no me gustaba lo que veía. Mi propia naturaleza me obligaba a hacerlo, a ser de esta forma, estaba codificado en mi carácter, codificado en lo más profundo de mi genética, tenía que ser así y lo era.
Entonces con este comportamiento estaba  anulando constantemente el flujo de mi vida, poniendo muros sobre el hilo de lo que el destino quiere. Condicionando, condicionándome, meditando y premeditando todo lo que tenía que romper de mi realidad. Radical, cobarde, todo lo necesitaba tener bajo mis brazos, bajo mi control: lo real, lo espontáneo, lo inevitable. Desesperada vería como mis dedos arañaban el fin de esa posesión, el anhelo de un imposible, el control de mi incontrolable vida.
Querer coger el viento con las manos y verme arrastrada por él, el peor de los movimientos. Porque la brisa solo existe para los que las nubes habitan, para los ligeros a los cuales la gravedad no afecta.

7 de febrero de 2012

El tren de los heridos - Miguel Hernández



Silencio que naufraga en el silencio
de las bocas cerradas de la noche.
No cesa de callar ni atravesado.
Habla el lenguaje ahogado de los muertos.

Silencio.

Abre caminos de algodón profundo,
amordaza las ruedas, los relojes,
detén la voz del mar, de la paloma:
emociona la noche de los sueños.

Silencio.

El tren lluvioso de la sangre suelta,
el frágil tren de los que se desangran,
el silencioso, el doloroso, el pálido,
el tren callado de los sufrimientos.

Silencio.

Tren de la palidez mortal que asciende:
la palidez reviste las cabezas,
el ¡ay! la voz, el corazón la tierra,
el corazón de los que malhirieron.

Silencio.

Van derramando piernas, brazos, ojos,
van arrojando por el tren pedazos.
Pasan dejando rastros de amargura,
otra vía láctea de estelares miembros.

Silencio.

Ronco tren desmayado, enrojecido:
agoniza el carbón, suspira el humo
y, maternal la máquina suspira,
avanza como un largo desaliento.

Silencio.

Detenerse quisiera bajo un túnel
la larga madre, sollozar tendida.
No hay estaciones donde detenerse,
si no es el hospital, si no es el pecho.

Para vivir, con un pedazo basta:
en un rincón de carne cabe un hombre.
Un dedo solo, un solo trozo de ala
alza el vuelo total de todo un cuerpo.

Silencio.

Detened ese tren agonizante
que nunca acaba de cruzar la noche.

Y se queda descalzo hasta el caballo,
y enarena los cascos y el aliento.

11 de enero de 2012

Y las uñas en las paredes

Me sentía extremadamente frágil en aquel momento, si me hubiesen tocado con un dedo, me hubiera derrumbado. Sin embargo, me estaba parcialmente cómoda dentro de mi estado de fragilidad, como si ésta fuese provocada por una percepción correcta de una realidad desagradable, percepción a la cual aspiraba en mi estado normal. Por otra parte, el poner en duda si la situación realmente podría ir peor, me proporcionaba fuerza. Mínima, pero fuerza. Como si no tuviese nada que perder porque ya lo tenía todo perdido; la fuerza del superviviente, la hija de la espada y la pared, de la vida y la muerte.

7 de enero de 2012

Hasta los dos más perfectos suman uno más uno. No hay número que te salve de la soledad; ni pares, ni impares.

6 de enero de 2012

Simplemente genial

El  mar encajonado presentaba sus  manchas de brillante aceite a mis ojos. Los buques resultaban enormes con sus altísimos costados. A veces, el agua aparecía estremecida como por el coletazo de un pez, una barquichuela, un golpe de remo. Yo estaba allí  aquel mediodía de verano. Desde alguna cubierta de barco, tal vez, unos nórdicos ojos azules me verían como minúscula pincelada de una estampa extranjera….Yo, una muchacha española, de cabellos oscuros, parada un momento en un muelle del Puerto de Barcelona. Dentro de unos instantes la vida seguiría y me haría desplazar hasta algún otro punto. Me encontraría con mi cuerpo enmarcado en otra decoración.

Nada - Carmen Laforet

4 de enero de 2012

Never know how much I love you...

...you give me fever when you kiss me!

2 de enero de 2012

Minúsculamente


Inevitable, a veces, sentirme tan torpe dentro de la inmensidad del mundo. Ilusa, enamoradiza o repelente, extraña, diferente... como si importase quién fuese yo y cuáles fuesen mis aspiraciones. Como si importase mi alrededor y lo que rodeo. Como si importasen mis llantos o mis carcajadas, que en el aire de la vida y en el suspiro del tiempo, mueren ahogadas, como si nunca hubiesen existido. Así de fácil. Invisiblemente viva, inevitablemente absurda. Estúpida y minúscula, cambiando lo que me rodea e incluso a mí misma, y a la vez sin cambiar nada. Alegre e inocente, más correctamente ignorante, frente a lo que no significo nada pero que lo es todo para mí, la vida. Lo único que tengo, por cierto, mi vida...